Con muchísisimo retraso, os enseño qué hicimos este año: estrellas de colores.
Está claro, cada año lo veo más evidente, necesitamos hacer adornos
nuevos y diferentes y, además, aprovechar los del año anterior. Y es que
nos hace muchísima ilusión desempolvar los adornos de años anteriores y
recordar lo bien que lo pasamos cuando los hicimos.
¿Cómo las hicimos?
Sencillísimo, con pajitas de toda la vida y bridas de colores, aunque las negras tampoco quedaban mal.
Juntas unas cuantas, enganchas la brida en el medio y aprietas: YA ESTÁN.
Y es que si lo piensas bien, estas estrellas tan bonitas son muy vistosas para todas las ocasiones del año, no sólo para adornar el árbol de Navidad.
La idea no es toda mía, viene de aquí.
Por supuesto, aprovechamos para hacer un poco de todo también y aprovehcamos y decoramos platos de plástico para llevar al cole
(no quedó ni una bolita en su sitio...)
¿Qué os parece? Sencillo, económico, divertido y alegre... ¿Qué más se puede pedir?
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