Quizá no tenga nada que ver con el tema del blog, quizá esté fuera de lugar, quizá se considere inapropiado, pero aquí lo dejo.
¿En qué mundo vivimos? ¿Hacia dónde vamos? ¿Qué vida espera a nuestros hijos?
Una vez recibí una llamada:
- ¿María?-
- Sí, ¡hola!-
- Necesito hacer algo, no podemos dejar que empiece una guerra, (...). Estoy buscando un billete y me voy de escudo humano, por ti, por mi familia, por todo lo que creo y por luchar por que quiero dejar un mundo mejor a los vienen (...)-
Sólo pensaba:
"Es una locura,
tiene sentido, pero es una locura,
te entiendo, pero es una locura,
me quiero ir contigo, pero es una locura,
es una locura muy cuerda...
¡CÓGEME OTRO BILLETE, TE ACOMPAÑO!!"
Al final no fuimos ninguno. ¿Y si todos hubiesemos ido? ¿Y si todos hubiesemos evitado esa guerra?
¿Habría guerras ahora? ¿ Habría refuegiados? ¿Huría la mitad del mundo hacia la otra mitad?
Si eso es mucho pedir, ¿podríamos acogerles ahora? Mientras se debaten las minucias técnicas de quién o cómo acoge a cuántos, hay gestos, PURA VIDA:
Mientras una avalancha humana de refugiados e inmigrantes que huyen de la guerra hacia Europa.
Una mujer reparte mantas
Un joven les lleva botellas de agua
El mundo blogueril se llena de iniciativas magníficas
Algunos políticos empiezan a reaccionar
Parece que cada vez hay más gestos humanitarios que ayudarán, sin duda.
No importa si es un gesto público o anónimo.
No importa qué asocación u organización ayudamos.
No importa quién, no importa cómo.
Importa que hay actividad, que hay reacción.
Importa que nos unimos y hacemos algo
Importa porque miles de pequeños gestos hacen un gran cambio.
Cuando pienso en tanto sufrimiento, pienso:
¡CÓGEME UN BILLETE!
Luego veo la ola de reacciones, entonces pieso:
PURA VIDA
¡Que la ola siga, el se haga grande, gigante, enorme, descomunal!
¡Que nos alimentemos de la PURA VIDA!
Por la empatía del ser humano, por que merezca la pena vivir cada segundo de cada minuto
No acabo de entender el principio, pero reconozco que -por motivos personales- me mantengo muuuy alejada de los medios de comunicación. Lo cual no impide que me acabe enterando de las cosas más "gordas". La verdad es que tengo poca fe en el ser humano, y sospecho que al final nos extinguiremos y nos lo mereceremos. En cualquier caso, parece que aún queda gente buena, pero diría que demasiado poca o con demasiado poco poder por cambiar las cosas. Ah, Mery, en el fondo la Arándana es muy pesimista...
ResponderEliminarHola guapísima!! ¿el principio? cuéntame y explico!!
EliminarNo suelo leer las noticias, me las cuentan, pero este exodo y las consecuencias mundiales que está teniendo nos están afectando a todos.
Querida Arándana: es muy difícil no ser pesimista con todo lo que está pasando, pero ese espíritu que llevo dentro me pide ver lo bueno en lo malo, jejeje.
Al final nos extinguiremos y nos lo merecemos, hasta entonces, luchemos! :):):):)